En los concept designs invertimos todo nuestro potencial creativo sin tener en cuenta de manera significativa los procesos de fabricación para su posibilidad de producción.
Es aquí donde vuela de manera total nuestro espíritu más abstracto para poder obtener productos que en el proceso final lleguen lo más innovadores posibles, porque como dice nuestro lema, pretendemos ser ‘locos’ pero no desde el desconocimiento sino desde la audacia.